Annemiek & Mirjam
Swolgen, Holanda. 2001.
Ambas madres biológicas tuvieron dos hijos del mismo donante de un banco de esperma creyendo importante la relación sanguínea entre los hermanos. Jip (3) y Lola (1) llevan el apellido de Mirjam a quien llaman «mamá», a Annemiek le dicen «mimi». El donante fue «anónimo», los niños jamás podrán conocer su identidad. Antes esta decisión y muchas otras ellas escriben un diario pensando en que los niños puedan leer de mayores y saber en qué se basaron sus decisiones.
Decidieron no casarse por convicción, «de ser heterosexuales tampoco nos hubiéramos casado».
Mirjam es enfermera, trabaja en una clínica de recuperación y asistencia para adictos y alcohólicos. Anmiek estudia psicología.